Represión y censura: el intento de silenciar a los sectores populares
La Unión de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (UnTER) expresó su enérgico repudio a las detenciones ilegales de Juan Grabois y Valentín Peralta, y a la represión desatada por el gobierno contra los sectores populares. La organización exigió el cese inmediato de este accionar represivo y se solidarizó con las familias de la Cooperativa de trabajo que ven en riesgo su fuente laboral.

Fotografía cortesía de Unter
La Unión de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (UnTER) expresó su enérgico repudio a las detenciones ilegales de Juan Grabois y Valentín Peralta, y a la represión desatada por el gobierno contra los sectores populares. La organización exigió el cese inmediato de este accionar represivo y se solidarizó con las familias de la Cooperativa de trabajo que ven en riesgo su fuente laboral.
El sábado 7 de junio, militantes pacíficos ingresaron al Instituto Juan Domingo Perón para evitar el desalojo de la Cooperativa de trabajo “Lo de Néstor”, a cargo de 16 familias de trabajadores gastronómicos que funcionan en el edificio declarado Monumento Histórico Nacional. Sin embargo, la policía reprimió a los manifestantes y detuvo a Grabois y Peralta sin orden judicial.
Este nuevo avasallamiento al derecho a la protesta comenzó el sábado 7 de junio, a partir del ingreso pacífico de militantes al Instituto Juan Domingo Perón para evitar el desalojo de la Cooperativa de trabajo “Lo de Néstor”, a cargo de 16 familias de trabajadores gastronómicos que funcionan en el edificio declarado Monumento Histórico Nacional. Además, se pretendía denunciar la disolución del espacio por parte del gobierno, de manera irregular atendiendo a la normativa que protege a estas instituciones.
En un país cuyo presidente se ausenta por diez días con la excusa de cumplir la primera visita oficial al nuevo Papa León XIV, pero que suma millas pagadas por fondos públicos para recibir premios de sectores de la ultraderecha global, mientras se continúa reprimiendo a jubilados, trabajadores del Garrahan, diputados y senadores oficialistas boicotean el tratamiento de leyes previsionales, de atención a la discapacidad y mejoras a los sectores populares, la detención de Grabois suma un ejemplo más al intento de disciplinar a los sectores opositores y replicar como práctica la censura a la memoria colectiva, como ya lo han hecho gobiernos conservadores y antipopulares.
UnTER exigió el cese inmediato de este accionar represivo, nos solidarizamos con las familias de la Cooperativa que ven en riesgo su fuente laboral y lxs compañerxs de Argentina Humana. Es urgente que todos los sectores sindicales, sociales, políticos y de derechos humanos continuemos unificando las luchas en una sola fuerza para resistir y construir una alternativa que defienda los derechos conquistados por años de lucha de la clase trabajadora.